La conducción eficiente son unas nuevas técnicas de conducción que permiten unos ahorros medios de un 15% de carburante, una reducción de emisiones contaminantes y un aumento de seguridad en la conducción. En vehículos de inyección la conducción eficiente conlleva:
- Un ahorro de carburante del 15% aproximadamente.
- Una reducción de las emisiones de CO2 del 15%.
- Una reducción de la contaminación ambiental.
- Una reducción de la contaminación acústica (el ruido producido por un coche a 4000 RPM es el mismo que el producido por 32 coches a 2000 RPM).
- Un aumento del confort de los pasajeros.
- Un ahorro en los costes de mantenimiento del vehículo (sistema de frenado, embrague, caja de cambios…).
- Un aumento de la seguridad en la conducción.
Recomendaciones para una conducción eficiente son:
- Cambiar a una marcha superior antes de 2500 RPM si el vehículo es de gasolina y de 2000 RPM si es diesel.
- Mantener una velocidad uniforme en la marcha más larga posible.
- Anticiparse al flujo de tráfico.
- Decelerar con la marcha más larga posible.
- Evitar acelerar y frenar bruscamente.
- Apagar el motor en paradas prolongadas (por encima de 60 segundos).
- No transportar peso innecesario.
- Evitar la utilización de portaequipajes y cargas en el techo.
- Optimizar el uso del aire acondicionado y de las lunetas térmicas.
- Comprobar la presión de los neumáticos con regularidad.
- Utilizar dispositivos de ahorro energético: el cuentarrevoluciones, el control de velocidad, el ordenador de a bordo, el económetro y los indicadores de cambio de marcha.